Observación (CEACR) - Adopción: 2024, Publicación: 113ª reunión CIT (2025)

Convenio sobre la política del empleo, 1964 (núm. 122) - Libia (Ratificación : 1971)

Seguimiento de las conclusiones de la Comisión de Aplicación de Normas (Conferencia Internacional del Trabajo, 107.ª reunión, mayo-junio de 2018)

La Comisión toma nota de la discusión que tuvo lugar en la Comisión de Aplicación de Normas de la Conferencia Internacional del Trabajo (Comisión de la Conferencia) en 2018. Reconociendo la manera en que el conflicto armado afectó a la pobreza, el desarrollo, el trabajo decente y la sostenibilidad de las empresas y reconociendo el papel del empleo en la paz y la resiliencia, la Comisión de la Conferencia pidió al Gobierno que transmitiera información actualizada sobre las estrategias de empleo así como datos sobre el mercado de trabajo (desglosados por sexo y edad), sobre los progresos realizados en el análisis de los datos sobre el mercado de trabajo, y en relación con las medidas de apoyo a las pequeñas y medianas empresas y a la participación de los trabajadores en situación de vulnerabilidad. La Comisión de la Conferencia instó al Gobierno a que recurriera a la asistencia de la OIT para adoptar y aplicar políticas activas de empleo y a colaborar con la OIT y los interlocutores sociales con el objetivo de reforzar el sistema de administración del trabajo de Libia para lograr el empleo pleno, productivo y libremente elegido. La Comisión toma nota de la información proporcionada por el Gobierno y desea señalar a su atención las cuestiones que figuran a continuación.

Artículos 1 a 3 del Convenio. Aplicación de una política activa de empleo. Consultas con los interlocutores sociales. La Comisión toma nota con interés de que el Gobierno indica que la estrategia nacional de Libia para el desarrollo humano y el empoderamiento, adoptada en 2021, incluye los siguientes componentes: formación para graduados cuyas cualificaciones no se ajustan a las exigencias del mercado de trabajo; fomento del empleo por cuenta propia mediante la creación de pequeñas y medianas empresas; establecimiento de una base de datos global sobre recursos humanos y oportunidades de empleo; tratamiento de los problemas de desempleo estacional y encubierto y estudio sobre la aplicación de la Ley de Seguridad Social; garantizar la orientación profesional y la tutoría para los recién llegados al mercado de trabajo y aumentar el alcance de la participación del sector privado en la formación profesional y técnica; revisar las políticas, actividades y procedimientos de empleo y desarrollar la legislación, y cambiar el rumbo del empleo de las mujeres mediante la empoderamiento y el desarrollo de capacidades.

Además, la Comisión toma nota de que la OIT ha puesto en marcha una serie de programas regionales de empleo juvenil financiados por la UE y destinados a los jóvenes de Libia que ni estudian, ni trabajan ni reciben formación («nini»). Estos programas ofrecen formación profesional, apoyo a la iniciativa empresarial y servicios de colocación para dotar a los jóvenes de las capacidades y oportunidades necesarias para incorporarse a la fuerza de trabajo, con el objetivo de reducir el desempleo juvenil y promover la estabilidad económica en la región. Además, para abordar mejor los retos que plantea el mercado de trabajo, la OIT lleva a cabo estudios en profundidad del mercado de trabajo de Libia. En estos estudios se examinan cuestiones críticas como las contribuciones de los trabajadores migrantes, el impacto de la pandemia de COVID-19 sobre el empleo, y las condiciones económicas más generales. Los resultados de estos estudios orientan la elaboración de políticas y programas para responder eficazmente a las necesidades del mercado de trabajo. La Comisión también toma nota de que en el informe sobre el desarrollo humano en Libia 20222023 se subrayan ciertas prioridades clave en materia de empleo que deben acometerse en un futuro próximo, a saber: garantizar la recuperación económica mediante la creación de empleo en el sector privado, colmar las lagunas de cualificación con formación específica, mejorar el acceso a los servicios básicos y a la protección social, y fomentar el empleo de los jóvenes. También se señala que la estabilidad política es crucial para el crecimiento sostenible. En conjunto, estos elementos subrayan la necesidad de estrategias globales para mejorar las oportunidades de empleo y apoyar la estabilidad económica en Libia. Además, la OIT también está ejecutando un proyecto destinado a ampliar el seguro social de los trabajadores agrícolas en la región árabe, incluida Libia, ya que estos trabajadores suelen estar excluidos de los regímenes legales. El proyecto aborda los altos niveles de informalidad y los riesgos específicos a los que se enfrentan los trabajadores agrícolas, e incluye diálogos políticos, investigación y elaboración de reseñas sobre políticas para identificar las mejores prácticas y proponer reformas. Asimismo, la Comisión observa que, según datos del Banco Mundial, el mercado de trabajo libio se caracteriza por un elevado desempleo, con una tasa oficial del 19,6 por ciento, y que más del 85 por ciento de las personas que trabajan lo hacen en el sector público y el sector informal. Además, la Comisión toma nota de que el Libya Economic Monitor del Banco Mundial de primavera del 2023 subraya que el mercado de trabajo libio comparte las características de los países ricos en petróleo en cuanto al predominio del empleo público y las de los contextos frágiles que afrontan el reto del desempleo, una elevada informalidad y un sector privado subdesarrollado incapaz de absorber a una población joven en rápido crecimiento. La Comisión toma debida nota de la información anterior, incluidos los objetivos de la estrategia nacional de Libia para el desarrollo humano y el empoderamiento, así como de los importantes desafíos que el Gobierno sigue afrontando, y espera que el Gobierno siga colaborando estrechamente con la OIT con miras a elaborar, adoptar y aplicar políticas nacionales integradas destinadas a promover el empleo pleno, productivo y libremente elegido, en consulta con los interlocutores sociales. Reitera su solicitud al Gobierno de que comunique información detallada y actualizada sobre el calendario y las medidas concretas adoptadas, así como acerca de los progresos realizados a este respecto, en particular en relación con la estrategia nacional de Libia para el desarrollo humano y el empoderamiento. La Comisión también quiere señalar a la atención del Gobierno la Recomendación sobre el empleo y el trabajo decente para la paz y la resiliencia, 2017 (núm. 205) que proporciona orientaciones fundamentales para que el país pueda recuperarse del conflicto y de la inestabilidad existente, ya que: i) subraya el poder del empleo y el trabajo decente para fomentar la paz y reducir los riesgos de crisis (la Recomendación destaca que, al generar oportunidades de empleo, los países pueden estabilizar las comunidades, aliviar la pobreza y reducir la probabilidad de que se reanuden los conflictos); ii) proporciona orientaciones prácticas para reforzar la resiliencia del mercado de trabajo mediante programas centrados en la recuperación, como la formación profesional, la creación de empleo y los regímenes de protección social (estas medidas son cruciales para reconstruir la economía libia y apoyar el desarrollo sostenible de la fuerza de trabajo); iii) subraya la necesidad de que los esfuerzos de recuperación tengan en cuenta a los grupos vulnerables, como las mujeres, los jóvenes y las personas desplazadas (atender las necesidades de estos grupos es clave para lograr la cohesión social y el desarrollo sostenible); iv) tiene como objetivo central reforzar las instituciones del mercado de trabajo y fomentar el diálogo social (esto se traduce en crear capacidad institucional y fomentar la colaboración entre el Gobierno, los empleadores y los trabajadores, estableciendo una base para un mercado de trabajo estable e integrador), y v) aboga por alianzas mundiales para apoyar a los países que se recuperan de crisis (en el contexto de Libia, el compromiso con las organizaciones internacionales y el aprovechamiento de la experiencia mundial son cruciales para aplicar estrategias de empleo y políticas laborales eficaces que puedan impulsar la estabilidad y el crecimiento a largo plazo).

Trabajadores migrantes. El Gobierno afirma que los trabajadores migrantes ilegales intentan regularizar su situación mediante el registro por temor a ser repatriados a sus países de origen y porque desean emigrar a Europa utilizando el país como punto de tránsito. El Gobierno indica que ha logrado progresos considerables en colaboración con los países vecinos, los países de origen y las organizaciones internacionales para reducir la migración ilegal. Ha instado a los migrantes a regularizar su situación en el país para poder disfrutar de los derechos garantizados por la ley para el empleo voluntario o el retorno voluntario a sus países de origen.

La Comisión toma nota de que la Misión Independiente de Investigación sobre Libia del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas informó sobre la esclavización de migrantes. A veces se obliga a los migrantes a trabajar fuera del centro de internamiento para particulares o empresas, mientras que otros, incluidos los niños no acompañados, se ven obligados a trabajar en explotaciones agropecuarias, en fábricas o en otros trabajos menores, a menudo sin una alimentación adecuada y sin agua (véase A/HRC/50/63, 27 de junio de 2022, párrafos 77 y 94). La Comisión también toma nota de que dicha Misión encontró motivos razonables para creer que los guardias exigen y reciben pagos por la liberación de migrantes, y que la trata, la esclavitud, el trabajo forzoso, el encarcelamiento, la extorsión y el tráfico generan importantes ingresos para personas, grupos e instituciones estatales (véase A/HRC/52/83, 3 de marzo de 2023, párrafo 44). La Comisión subraya una vez más que el trabajo forzoso u obligatorio, en donde exista, es incompatible con el principio de empleo libremente elegido establecido en el artículo 1, 3), del Convenio. Por consiguiente, pide una vez más al Gobierno que transmita información más detallada sobre las medidas específicas adoptadas para abordar los casos denunciados de abusos contra trabajadores migrantes y sus familias, incluidos los detenidos por la Dirección de lucha contra la migración ilegal. Asimismo, reitera su solicitud al Gobierno de que proporcione información sobre los progresos realizados en la elaboración de la nueva ley del trabajo destinada a aumentar la protección de los derechos de los trabajadores migrantes y sus familias, así como sobre la elaboración y la adopción de cualquier estrategia dirigida a abordar la migración irregular, y de que transmita copia una vez que se hayan adoptado. Por último, la Comisión pide de nuevo al Gobierno que comunique información detallada y actualizada sobre las medidas adoptadas o previstas para promover el empleo de los trabajadores migrantes.

La Comisión plantea otras cuestiones en una solicitud dirigida directamente al Gobierno.